Tras tocar en bandas inglesas como Neon Islands o Simple Fiction, el músico madrileño afincado en Londres inaugura su nueva aventura en solitario y en castellano.
Su EP de debut, publicado hoy viernes 29 de abril, plasma con honestidad las ilusiones y frustraciones de su generación en un discurso personal pero extrapolable a lo universal. Viene acompañado del nuevo vídeo del tema «Farola«
Musicalmente bebe del pop nacional de Leiva, Xoel López, Viva Suecia o Iván Ferreiro a la vez que de The National, Alvvays, Tame Impala o Editors.
Donde muchos ven simplemente un atajo para alcanzar popularidad mediática, Carlos Gris ve un espacio para el autoconocimiento. Sincero y transparente, el madrileño afincado en Londres utiliza la música como un mecanismo de explicación de sí mismo, de su trayectoria vital y del mundo que le rodea. Así de simple, así de romántico y bonito. Así de puro. Lo suyo es el pop con base en la canción de autor, bebiendo de referencias nacionales como Leiva, Viva Suecia, Iván Ferreiro, Xoel López, Enric Montefusco o incluso Dani Martín; pero vistiendo sus canciones con arreglos, efectos e instrumentaciones que, por momentos, pueden traernos un retrogusto de artistas internacionales como Gus Dapperton, Alvvays, The National, Tame Impala o Editors.
Así, sus raíces engarzadas en el pop nacional y su background más reciente, moldeado tras varios años tocando en bandas londinenses como Neon Islands o Simple Fiction, se unen en su nueva aventura. Flotante, su EP de debut en solitario y en castellano, es un honesto y fiel reflejo de quién es, tanto a nivel personal como musical. Grabado y producido junto a Ramiro Nieto, resulta un auténtico confesionario de las ilusiones y frustraciones propias de su generación: desde la incertidumbre del amor a distancia, presente en su single homónimo, ‘Flotante’, a la deconstrucción del concepto de pareja fruto del individualismo expuesto en ‘Tus planes’, pasando por la obsesión por la inmediatez de ‘Un rato largo’.
En ese sentido, ‘La peli de Jonás’ marca ese contrapunto necesario de pausa que puede permitirnos mantener un equilibrio entre lo que arrastramos o echamos de menos de la adolescencia y lo que nos atropella o lo que nunca llega de la edad adulta. ‘Farola’ completa el EP en un plano intimista y desnudo que hace juego con el sentimiento de fragilidad y privacidad que expone el autor, recreando el ambiente propio de las noches compartidas, en su caso, iluminadas solo por la farola que hay frente a su casa de Londres. En su conjunto, por tanto, Flotante es un libro abierto que Carlos Gris nos regala sobre sí mismo, pero que cualquier coetánex puede hacer propio leyendo entre líneas. Porque la transparencia y la sinceridad, máxime cuando se plasman en clave pop, son el camino más corto hacia la empatía.