Algo suena en mi nube sonando

Bobo club: Conttra nos adentra en el club más extravagante de 2021

Publicado en Por Jess

Se acercaba el momento de formar parte y conocer las extravagancias del Bobo Club. Llegaba el 30 de Abril, estabamos nerviosas, no sabiamos que nos encontrariamos en ese local que tanto revuelo estaba teniendo en la ciudad Condal, paso a paso sin titubear, de repente nos encontrábamos dentro del nuevo Club de Barcelona donde nos prometían que todos éramos bienvenidos, donde podíamos vivir imágenes disparatadas como Perros jugando al póker de Cassius Marcelluses, jugándose vinilos de Conttra o a la mujer de El jersey amarillo de Picasso, en una esquina sentada tomándose un Bloody Mary y un sinfin de imágenes surrealistas y absurdas pero de lo más divertido. El Bobo Club, sin duda, prometía.

Nos sentíamos como en casa, un ambiente en la sala muy familiar, con público de todas las edades, público súper entregado y que estaban allí apoyando a Conttra en ese debut tan esperado después de 2 años sin subirse a un escenario, un escenario lleno de flores, una maravilla visual.

Se apagaron las luces, se hizo el silencio y acto seguido aparecieron en el escenario Albert (vocalista y showman), Martí (bajo y coros), Oscar (guitarra), Guille (batería) y Bruno (teclado). El Bobo Club se estrenó con Mi festival con ese tarareo pegadizo “uh uh uhhh” , Albert movía las caderas de aquí para allá, fluyendo como si nadie le estuviera mirando, un auténtico espectáculo, cuando de repente se acercó al micro y nos dijo:

Benvinguts al Bobo Club!

Nos vinimos todos arriba, ¡por fin se había inaugurado! estábamos felices de estar allí, acompañándolos, disfrutando de ellos y de su música. Cantando bien alto “Un te quiero sin lamentos suena a hit mundial.”  Empezó a sonar un ritmillo ochentero, un tema para mi imprescindible de buen rollismo Colibríes,  donde al final del tema se marcó un a capella con la gran frase “no lo ves, que no soy yo”, un foco cenital caía sobre él, gallina de piel.

De repente, todo se relaja, Albert se sienta, todos estamos expectantes y empiezan a sonar los primeros acordes de Adicción, una dulce introducción de electro-pop. De repente, se levanta y todos empezamos a aplaudir, todos cantamos “He llegado a ser tan fugaz por ser perfecta.”

Foto: Cris Leo

Conttra, emocionados, en silencio, mirando al público mientras estábamos rotos de tanto aplaudir, nos faltaban manos, ovaciones, gritos, admiración. Albert se dirigió a nosotros: 

“La veritat, és que és un regal i no té un altre descripció,  el vostre feedback està aquí quasi dos anys sense trapitjar un escenari. La vibració es increïble.”  – CAST. “La verdad, es que es un regalo y no tiene otra descripción, vuestro feedback está aquí después de casi dos años sin pisar un escenario. La vibración es increíble”.- 

Empieza a sonar Días en los que pudimos bailar, Albert embriagado por la emoción: “Crida a la llibertad, visca la cultura!”. Para mi esta canción tiene una frase por bandera, “¡Hemos venido a triunfar!”, una frase que da fuerzas sobre todo en estos momentos.  

Por fin el esperado tema Bobo Club, los ochenta invaden la sala, el club creado para que nadie, absolutamente nadie se quede fuera. Momentazo cuando la canción para en seco en “autoinvitados”…..-se hace un silencio- y de repente un subidón con: “¡venga!, déjalos pasar.” en ese momento encendieron las luces hacia nosotros, repitiendo todos al unísono “quedarse en Bobo Club”. Después de este subidón, nos vamos a una canción llena de belleza sutil la cual me encanta, La belleza que nos salvará, Albert se sale con unos agudos impresionantes, verle modular su voz es un espectáculo, te traslada a un joven Freddy Mercury, a un desenfadado Prince

Nos presenta a Bruno, el chico del teclado el cual nunca sale en las fotos, pero esa frase ya no la podrán decir más, porque mi compañera Cris le hizo unas cuantas. Albert vuelve a sentarse, empiezan a sonar unas notas que deparan tristeza y nostalgia, es la hora de Sin, que bonito cantar “Antes hay que morir para poder renacer.”  

Foto: Cris Leo

Nos sorprenden con una versión totalmente diferente de ¿Dónde estás?, una versión acústica donde él, hace brillar su voz. “Deja ya de venerar y el cambio llegará.” y vuelve a sorprendernos con otra versión de esta, pero con un solo de guitarra, un rollo garage rock muy sexy. De repente, se van, todo se queda a oscuras, todos empezamos a aplaudir esperando que salgan otra vez, no puede ser que el Bobo club ya haya acabado, necesitamos más. La vuelta fue acojonante con Versión final, un ritmazo lleno de felicidad y Albert bailando como si lo hubieran arrancado de una pista de baile de los años 80, un auténtico showman, qué manera de llenar el escenario. Nosotros sentados en nuestras butacas a regañadientes porque solo queríamos levantarnos y saltar. 

Albert nos recuerda que no serían Conttra, sin diez años de carrera, no podían irse sin tocar esos hits en inglés tan imprescindibles. Suena I Got Down on My Knees For You, un rock alternativo tan necesario, yo soy muy de Rock y me sonó tan tan bien, la música, la pronunciación, todo. Canela fina. Remarcamos dos momentazos en este tema, Albert arrodillado poniendo ojitos cantando “I got down on my kness for you babyyyy” y para ponerle la guinda al pastel, Bruno nos sorprende bajándose del teclado y haciendo un solo junto a Oscar, y menudo solo, nos quedamos con la boca abierta.

No me esperaba que el temazo que venía, era con el que les descubrí ya hace algunos años. Your Sister, como me gusta cantar  “Champagne, Gin tonic, Bloody Mary!”. Lo mejor, la frase final, “I like your pussy babe”.

Foto: Cris Leo

Quienes adoramos también a Sidonie, aún nos faltaba una gran canción, De cine. Que manera de bailar en el asiento y repetir mil veces “Estás de cine”. La guinda final. Todo paró, todas las luces se encendieron, parecía que todo ya había acabado, incluso se hicieron la foto final, pero la insistencia del público y la negación a salir del Club les hizo volver a tocar.

Antes remarcaba que Albert me recordaba al señor Mercury y en esta canción nos hizo repetir “Estás de cine”, junto a sílabas seguidas creando palabras imposibles, sin duda un buen remember al 12 de julio de 1986 en el estadio de Wembley

Y así el Bobo Club cerraba sus puertas ese viernes noche para abrirlas en otro lugar, un club nómada y clandestino, que hará disfrutar a todo al que se atreva a divertirse sin ser juzgado. 

Foto: Cris Leo

Cris y yo salimos del Bobo Club cantando “De cine” sin parar, cogimos el metro, y seguimos cantando, salimos felices, con un buen rollo increíble. Sin duda un concierto imprescindible.

Nos veremos de nuevo, no sabemos cuando ni donde, pero seguro que en el Bobo Club!

¿Quieres ver la Charla que mantuvimos con Albert de Conttra? puedes verla aquí

Jess
jessica.pe88@gmail.com

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