Hace 20 años (se dice rápido) por primera vez asistí a mi primer concierto, donde descubriría la voz más potente de todo el panorama musical.
Recuerdo que su voz se clavo muy dentro de mí, y que el directo que presencie de Mclan se guardo en mis recuerdos.
Paradojas de la vida, no los vi más, y después de todos esos años y habiendo pasado esta especie de capítulo de Black Mirror (dichoso virus) de nuevo, Mclan reaparece y vuelve a ser el primer concierto que disfruto pasados estos meses (como si la cuenta se hubiera puesto a 0), y os aseguro que he viajado a ese escenario de (Almería -Vera) donde veraneaba y donde me enamoré de la música que ellos hacen.
Poder volver a disfrutar sus temas, temas que marcan una banda sonora en mi vida, ha sido un regalo y un chute de vitamina, porque os aseguro que las ganas de volver a poder disfrutar de los conciertos, durante este kit kat bizarro, han sido muchas y muy necesarias. Para mí es mi terapia y supongo que a muchos les a costado lo suyo procesar y pensar en el momento de volver a disfrutar de esa pura maravilla y lenguaje universal que es la música, ¡¡¡qué necesidad vital!!!
Ayer en la Anella Olímpica, dentro del Cruïlla xxs , en Barcelona, con toda la magia y vistas del lugar, y de una manera más peculiar de lo habitual, con sillas y mesas, asistíamos al primer concierto dúo acústico de los jefazos: Carlos Tarque y Ricardo Ruiperez, MCLAN de toda la life.
Ellos mismos, con esa mezcla de subidón y nerviosismo, por ser su primera vuelta y en un formato diferente, aparecían en escena dando las gracias por al acogida (sold out) y cogiendo guitarras en mano para sentarse y regalarnos un directo de más de dos horas (que gozada).
La primera canción para disparar las emociones, fue “filosofía barata” , con su letra reivindicativa y su rollazo roquero.
Siguieron con un amplio repertorio de toda su trayectoria (que no es poca) como con “Souvenir”, “Dando Vueltas” (tema que me hace viajar por mi vida), “Calle sin luz” con su ritmo y su rock & roll tan distintivo e inconfundible, tan de ellos.
No faltaron tampoco los momentos de tocar la fibra, con “Roto por dentro”, Tarque nos arrancaba hacer los coros y cantar a su compás, “Esperanza”.
La velada nos permitió cantar y disfrutar con la luna mirándonos y de fondo algunos rayos (Tarque, lo comento en plan, “tenemos hasta rayos»), y es que no me extraña que aparecieran, a pesar del buen clima, porque su energía es eléctrica.
Entre ellos dos se veía esa complicidad cultivada de años, y esa amistad que ya no hace falta ni decirla, entre ellos se hacían bromas y nosotros disfrutábamos al ver que el espíritu de Mclan sigue intacto y con su magnética fuerza musical.
Nos comentaba que Barcelona ha sido su primera ciudad elegida para tocar después del confinamiento, que es una ciudad que quieren y donde agradecen el cariño que siempre reciben, y nos comentaba que a pesar de que todo parece que vuelve a la “normalidad”, aún teneos que seguir siendo conscientes y coherentes con lo que está pasando, tenemos que poner de nuestra parte y que tenemos la mayor responsabilidad para salir de esto, y la gran noticia es que nos anunciaron que vana sacar un nuevo disco y que esperan hacer gira,¡¡¡ tremendo!!!
Dedican el tema de “California” a todo ese equipo humano que les rodea, que les da seguridad y les cubre las espaldas, Dani su manager, Toni su técnico de sonido, etc.
Siguieron con su vuelta por temas de siempre que a todos los que Mclan han formado nuestra banda sonora, con solo escuchar los primeros acordes ya nos sacaban unas palmas, y es que el público estaba más que entregado y eso era más que evidente para ellos.
Decir Tarque “a ver qué os parece esto …” y sonar «Miedo«, es en plan, nos parece que forma un mundo de historias repletas dentro de nuestras vidas, y que el “Uo” sonó al unísono.
Con el tema “Hasta la vista” se fueron del escenario, y el público comenzó a tararear su vuelta al ritmo de “Maggie Despierta” y reaparecen agradecidos y tocan esa misma, marcándose un cameo casi al final de la canción, con un tema de Andrés Calamaro, cantando “Te quiero igual”, para sorpresa y gustazo de todos.
Se notaba el buen rollo y las ganas de volver a conectar con el público, estar con ellos y disfrutarlos, y a los asistentes os aseguro que nos pasaba exactamente igual, hacia falta su vuelta y se les chava muchísimo de menos.
Suena “Quédate a dormir” y creo que la mayoría nos quedaríamos allí con ellos a dormir.
Tarque se arrancón para sorpresa acompañado por Ricardo, con un arranque flamenco de cajón por bulerías, momento muy gracioso. Se despiden con ella, pero no les queríamos dejar marchar y reaparecen con uno de sus temas más cantados “Carolina”.
Diciéndonos que ha sido alucinante (peculiar también) y que esperan volver a la ciudad que llevan en el corazón, Barcelona (muchas amistades y muy buenas).
“Concierto Salvaje” fue el broche final, donde todos nos levantamos y les aplaudimos, y ellos en pie también con sus guitarras haciendo un redoble para dar por finalizado el directo.
Creo que el aplauso se lo van a guardar, y nosotros, los que hemos disfrutado de nuevo de ellos, os aseguro que como siempre se nos queda a fuego en la piel lo vivido.
EL escenario, ya sí, se quedo sólo con sus guitarras, mientras sonaba de fondo, un temazo de Chris Isaak “Lie to me” (me gusta quedarme con la canción que escogen de cierre).
Agradecer al festival Cruïlla por darnos la oportunidad de poder volver a disfrutar de Mclan.
A MCLAN, GRACIAS Y GRACIAS POR VOLVER A REGALARNOS VUESTRO CHUTE DE MÚSICA, GRANDES Y ¡¡¡VIVA EL ROCK & ROLL, SALVAJES!!!
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